La única forma de saberlo es a través
de la identificación de su especie. En
época de lluvias los hongos silvestres abundan en jardines, campos y bosques y
muchas veces son recolectados para la preparación de sopas o ensaladas; sin
embargo, pueden ser muy peligrosos para la salud.
La mayoría de los hongos son difíciles
de clasificar a simple vista, por lo que si algunos son comestibles, otros
pueden resultar alucinógenos o venenosos.
Al respecto los especialistas recomiendan no hacer caso de mitos como
hervirlos en agua con ajo, una moneda o una cuchara para “saber” si son
tóxicos. Lo anterior es muy riesgoso; lo
mejor es que un experto lo aclare.
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